Descripción
Desde 2011, La Callejuela decidió criar en biológica estática algunas botas de sus vinos.
Concretamente fueron once las destinadas a tal fin.
Unos años después, los Hermanos Blanco, Ramiro Ibáñez y Er Guerrita, dieron forma a una original propuesta comercial: cada año, se elegiría una de las botas y se embotellaría al 100%.
Nacía así el proyecto 1/11, del que hoy vemos la sexta edición.
El vino, en general, se reparte por un estricto sistema de cupos. Un buen grupo de aficionados acopian botellas con dos objetivos diferenciados y complementarios: beberse alguna ipso facto y guardar alguna otra para que cuando se llegue al final de la serie, se pueda hacer una cata que promete ser mítica.